Después de aprender a consumir productos y mirar la fecha de vencimiento después; a quemarme con la sartén y que ya no me importe; o a quedarme encerrado del lado de afuera, hay que hablar de cosas más agradables:
Hay un árbol que depende de mí para sobrevivir y esa es una responsabilidad que también forma parte del arte de vivir solo.
Cuando mi hermana me regaló este mini ombú para mi casa, decidí que de su florecer dependería el éxito de mi vida en solitario. Me gustaba (y me causaba gracia) la idea de que la firmeza de su tronco, la solidez de la corteza o que la fuerza sus raíces fueran todas metáforas de mi suerte aquí. Para bien o para mal: como que si se moría a los diez días, era mejor volverme a casa porque tampoco me iba a poder cuidar a mí mismo.
Yo le pongo agua, no mucha, y cuando puedo lo acerco al borde de la ventana para tenga mejor luz o por si pasa una brisa. A un costado le crecieron como otras plantitas que no sé si le harán del todo bien, pero yo se las dejo porque me gusta cómo quedan. A cambio, esta planta me ofrece una bocanada de aire fresco y una señal de paz en miniatura: una presencia que desde un séptimo piso mira el ritmo frenético de los autos que pasan y les dice "A ver qué hacen ustedes cuando se les acabe el petróleo".
Hombres y árboles nos llevamos bien porque el árbol es una especie de ser humano del reino vegetal. Si llevara esta pequeña escala de la relación hombre-naturaleza a un plano más general, nunca podríamos entender esta guerra declarada entre los humanos y el planeta que hace que los ríos se salgan del cause y que una ola gigante se lleve puesta una ciudad o que un terremoto no resista tres noticieros seguidos si no mata a 10 mil personas por lo menos. O para llevarlo a un ejemplo más casero, que los que cumplimos en junio soplemos velitas en manga corta.
Algunas veces me olvidé de regarlo y se puso un poco amarillo, pero bueno, la idea es que tampoco le vaya mejor que a mí.
Quiero aclarar que todavía no le hablo y que espero no llegar hasta ese punto.
Continuará...
=
Poemario
Hace 9 meses.
15 comentarios:
Se me había ocurrido un chiste, pero no quise herir susceptibilidades de comentaristas...
Me di cuenta de que no te regalé nada para tu casa: ouch! Pero bueno, hice que te compremos ropa para tu cumple y que, por ende, la facultad siga formando parte de tu vida. Besos!
¿No te sentís como "querida encogí a los chicos" pero al revés?
Por el estado saludable del árbolito parece que tan mal no te va. Te lo digo yo que trabajé en un vivero.
Evangelina
Que bueno! yo en 5 años de vivir sola nunca pude hacer durar una planta! asi que bien lo tuyo...
El gato vive porque me hace acordar si me olvido de darle algo... yo si hablo con el jajaja incluso discutimos!! es que a veces se pone pesado....
que lindo q esta el bonsai!... no sabia q usabas la sarten, bien! no solo usas el delibery.
y en cuanto hablarle, creo q el arbolito te lo agradeceria... algunos dicen q les hace bien!
besotes.
Carla
Hermano! Que bueno saber que sigue en pie, se ve sano. Pensar que lo elegí, lo planté en una maceta comprada para la ocasión, y cuando te lo mostré te pareció una rama y no te gusto. miralo ahora convertido en un mini representante de tu vida..
Ahora te toca la parte dificil que es la poda.. Ahí se define la forma, aveces un par de ramas se secan y no queda como uno lo pensó, etc. El significado trasladado a la vida, queda a cargo tuyo.
Por mi parte, preferiría que no haya paralelismo entre estos arbolitos y nuestras vidas. Ya que al que me regaló mi novio, después de años de tenerlo en su poder, lo regué mucho y murió.
Besos, tu hermana.
Pablis, los ríos "se salen de su cauCe", que cauSen desastres es otra cosa...Besito, sabés que sólo quiero optimizar tu rendimiento -y entiendo que fue 1 error de tipeo, no...?- para los fanáticos!
pd: yo soy de junio y siempre soplo las velitas en vestidito.
Me encanta los bonsai,el tuyo se ve muy lindo eso demuestra,a mi parecer,que lo cuidas bien.Ademas yo creo que a las plantas les tiene que gustar el lugar en donde estan sino por mas que las cuides a veces no sobreviven(lo digo por experiencia).
Me encanta la metáfora del árbol y la vida, aunque yo no tuve mucha suerte con las plantas. Pero fue por regarlas demasiado, que es preferible a que se te mueran por no regarlas. ¿Sería eso como una metáfora del balance que uno tiene que encontrar en la vida? Tu bonsai en la ventana me hizo acordar a Leon, de la película El Profesional, que el tipo amaba a su plantita, pero era un asesino a sueldo. Mejor me quedo con la idea de la metáfora. Un abrazo. Mario
Cuando me fui a vivir solo por primera vez (¿cuántas veces uno se va a vivir solo?) me compré una maceta increíblemente compatible con mi nuevo departamento del barrio de las Cañitas. Era turquesa, con venecitas (sí, lo sé, parezco una mina hablando así). Que nunca le haya puesto un gramo de tierra -ni mucho menos una planta, obviamente- no quiere decir que no me haya servido en aquellos años tan felices. Primero fue cenicero -y eso que no fumo- después, lapicero -y eso que casi no escribo a mano- y hasta llegó a ser porta cartas, saumerios y cables cargadores de ipod. Hoy tengo casa con jardín, pero hace unas semanas se me ocurrió probar si la maceta funcionaba. No te voy a decir que ahora tengo un rosal, no: pero volví a tener un cenicero de la concha de la lora. Y eso, como dije antes, que ni siquiera fumo...
PD: No soy insensible. Tengo una gata hermosa a la que alimento todos los días y que -me acabo de dar cuenta- le encanta la cerveza.
Turquesa con venecitas es re Paulita -y de decorador light-
Pablito, si realmente hubiec muerto ese bonsai a los 10 dias hoy estarias deprimido en la casa de tu madre...mejor no hagas esos paralelismos porque si salaen mal las consecuencias son terribles!
A ver cando voy a comer picada con Coca Cola o venis vos a comer picada con Coca Cola a nuestro nuevo hogar!!!
Exelente paralelismo, pero la vida de un vegetal depende del respeto y cariño que le tengas, así que no lo relacionemos directamente con el éxito o fracaso de tu vida independizada.
Saludos.
P.D.: Igual cuidalo para evitar una posible depresión.
Ahhh, me olvidaba de felicitar a tu hermana, por la exelente mano botánica en el arte de criar estos pequeños arbolitos.
Ahora si, chau.
Desde ET, la planta y Eliot no veo una metáfora tan botánica.
¿Quién sera el extraterrestre en este caso, para completar la triada?
Por otro lado... ojo con que no te crezca el bonsai.. conozco casos. La sensación es similar a "tengo tanta suerte que me pongo un circo y me crecen los enanos".
abrazo!.
Creo que algunas veces les he hablado a algunas plantas de mi jardín (el único abedul que queda, el floripondio); y a veces las acaricio levemente. Confío en que lo perciben, aunque eso no garantiza nada.
Por lo demás, parafraseando a Lennon, parece que la Tierra fuera el negro del mundo.
Publicar un comentario